El Sarampión regresa a las Américas después que en el 2016 fue declarado libre de este virus

Venezuela es el país más afectado con 886 casos entre el año pasado y este, seguido por Brasil con 14 y Estados Unidos con 13.

Tras efectuar una vacunación masiva durante veintidós años contra el sarampión, la región fue finalmente declarada libre de la enfermedad por un Comité Internacional de Expertos el año 2016.

A pesar de ello, la Organización recordó en su día que el virus seguía activo alrededor del planeta, lo que comportaba el riesgo de la aparición de nuevos brotes en la región.

Así, en 2017 cuatro países de la región notificaron ya casos de sarampión: Argentina, Canadá, Estados Unidos y Venezuela. Y en lo que va de año, los han registrado nueve países : Antigua y Barbuda, Brasil, Canadá, Colombia, Estados Unidos, Guatemala, México, Perú y Venezuela.

El país más afectado es este último con 886 casos entre el año pasado y este, seguido por Brasil con 14 y Estados Unidos con 13.

La totalidad de los casos en países como Brasil y Colombia fueron por parte de ciudadanos venezolanos no vacunados.

También existe preocupación por los casos en Europa al cuadriplicarse la enfermedad entre 2016 y 2017, situación que aumenta el riesgo de importación de casos en las Américas.

El plan de acción adoptado en 2017 para mantener la eliminación del sarampión señala que los niveles de inmunización de la población deben ser del 95% o superiores. La cobertura regional de la primera dosis de la vacuna contra el sarampión, la rubéola y las paperas se ha situado entre el 92% y el 94% durante los últimos cinco años.

Las recomendaciones de la OPS fueron las siguientes:

  • Vacunar para mantener coberturas iguales del 95% con la primera y segunda dosis de la vacuna contra el sarampión, la rubéola y las paperas.

  • Reforzar la vigilancia epidemiológica para detectar casos sospechosos en los servicios de salud públicos y privados.

  • Ofrecer una respuesta rápida al detectar casos importados de sarampión para evitar el restablecimiento de la transmisión endémica del virus, incluyendo la activación de equipos que den seguimiento a los casos y sus contactos.

  • Conservar reservas de la vacuna del sarampión-rubéola (SR) para acciones de control de casos importados en cada país de la región.

 

Por / ONU.