O nos divorciamos del plástico, o nos olvidamos del planeta

La gente de Watamu, en Kenya, trabaja en la conservación del océano recogiendo plástico de la playa cada viernes.

Alrededor de 13 millones de toneladas de plástico son vertidas en los océanos cada año, afectando la biodiversidad, la economía y potencialmente nuestra salud.

Las cualidades de este material, barato, ligero y fácil de producir han llevado a que su producción alcance cantidades a las cuales somos incapaces de hacer frente. Solamente una pequeña fracción de los plásticos que son descartados se recicla.

Lo más preocupante, es que un nuevo informe de ONU Medio Ambiente revela que, de seguir las cosas como están, la producción de plástico no solo crecerá, sino que se duplicará en las próximas décadas.

Desde los años 50, la producción de plástico ha superado la de cualquier otro material y la mayoría de los productos que se hacen están diseñados para ser descartados después de un solo uso. Esto ha hecho que los empaques de plástico ahora representen la mitad de los desechos de este material alrededor del mundo.

Los estudios sugieren que las bolsas de plástico y los contenedores hechos de espuma de poliestireno pueden tomar hasta miles de años en descomponerse y contaminan suelo y agua. Además, con el paso del tiempo los plásticos se dividen en fragmentos más pequeños llamados micro plásticos que al ser consumidos por animales marinos pueden entrar en la cadena alimenticia humana.

Los microplásticos han sido detectados en la sal de mesa comercial y algunos estudios aseguran que el 90% del agua embotellada y en el 83% de la de grifo, contiene partículas de plástico. Esto es preocupante, ya que poco se sabe del impacto de este material en la salud humana.

Grandes cantidades de desechos plásticos son lanzados a los ríos.

Para reducir la cantidad de desperdicios se necesita que los gobiernos promulguen políticas fuertes que empujen hacia un modelo más circular de diseño y producción de plásticos.

“Todo el mundo tiene que estar involucrado, a nivel de gobiernos, estos tienen que tener la visión, la dirección, establecer las políticas que podrían incluir leyes nacionales, y que podrían incluir acciones con toda la sociedad”, explica el representante regional.

Los gobiernos necesitan mejorar los sistemas de residuos e introducir incentivos financieros para cambiar los hábitos de los consumidores, los minoristas y los fabricantes.

Todos somos responsables de la contaminación del medio ambiente por lo tanto aquí mostramos algunas prácticas que abonarán en buena medida a minimizar este impacto de contaminación.

Estas son algunas medidas que podemos tomar para librar los océanos de este material contaminante.

  • Separa los desechos de tu hogar para promover el reciclaje.

  • Evita el uso de productos de plástico de un solo uso, como cubiertos y vasos.

  • Evita comprar productos que vienen muy empacados.

  • Utiliza menos bolsas plásticas y las que uses reutilízalas.

  • Cuando pidas domicilios pídeles que no traigan cubiertos ni vasos plásticos.

  • Utiliza botellas y contenedores de comida que puedas reutilizar.

  • Encuentra cuáles son las opciones que ofrece tu comunidad para reducir tu huella de plástico.

  • Educa a tus amigos y familia sobre la crisis del plástico.

  • Motiva a las escuelas a que les enseñen a los niños sobre esta problemática.

 

Por / ONU.