El Plástico de un solo uso atenta contra el medio ambiente

por: Diario CoLatino.

“Algunos productos no tienen sentido utilizarlos como la pajilla, que debe pasar 200 años o más para desintegrarse, que depende del tipo de plástico con el que fue manufacturada y solamente dura 15 o 10 minutos en nuestras manos, es por esta huella que dejan este tipo de productos en al medio ambiente es que pedimos sean eliminados”, dijo Laura Mejía, coordinadora del Programa Cero Basura del Centro Salvadoreño de Tecnología Apropiada (CESTA).

El CESTA, junto al Colectivo Jaguares de la Madre Tierra, lanzó la campaña “Libérate de los Plásticos”, en un llamado de alerta y exigencia sobre la producción y consumo sin regulación del plástico de un solo uso en el país.

La campaña pretende, además, motivar a la población en general a contribuir en la reducción de los productos desechables, y que los partidos políticos en la Asamblea Legislativa trabajen para emitir una Ley de Prohibición de Plásticos de un Solo Uso y generar los artículos alternativos y amigables con el ambiente.

“La botella plástica que tiene diferentes químicos muy fuertes, están dañando nuestra salud. Hay estudios científicos que afirman que está produciendo cáncer en la población. Son productos muy dañinos porque contaminan también el aire cuando muchas personas queman estos plásticos para deshacerse de ellos, ya que liberan furanos (dioxinas, gases ácidos, partículas y dióxido de carbono) en nuestro país”, señaló Mejía.

La elaboración de productos plásticos utiliza más de 170 sustancias químicas, que impactan los ecosistemas y la salud de la población como diversos cánceres y el deterioro de los sistemas reproductivo e inmunológico. Por lo que el CESTA, considera urgente el no consumo de este tipo de plástico y rediseñar su uso, explicó en su intervención el presidente ejecutivo del CESTA, Ricardo Navarro.

“De todos los productos plásticos que se producen en el planeta, el 40% son para sustancias que solo se utilizan 5 minutos, y luego pasan a la naturaleza, contaminándola y es alarmante en todo lo sentido. De la contaminación que generamos y se tiran a los océanos, calculan los científicos que para mitad de siglo, habrá más plástico que peces”.

“¿Cómo podremos vivir con océanos llenos de plástico y no de peces?, y lo peor, en el planeta los seres humanos en promedio estamos respirando, comiendo y bebiendo plástico a razón de 5 gr. por semana, o sea, el equivalente de una tarjeta de crédito, cada semana la humanidad come plástico, claro, en algunos países más y en otros menos, pero todos consumimos”, agregó Navarro.

Asimismo, explicó que el principal agente transmisor del plástico es el agua, que se encuentra constantemente en un proceso de contaminación, ya sea por botar la basura a las aguas o los residuos de los procesos industriales, liberados sin tratamiento. Los que después se convierten en micro partículas ajenas al ojo humano, pero al realizar otro tipo de análisis se detectan de inmediato.

Otra situación que destacó y pidió debe tenerse en cuenta, a raíz de la pandemia por Covid-19, es el uso desmedido de productos descartables para la bioseguridad como mascarillas, guantes y otros insumos. Desechos sanitarios que son un potencial riesgo para la salud y el ambiente, cuando no son tratados correctamente como desecho bioinfeccioso.

“Nosotros vamos a presentar una propuesta de ley ante la Asamblea Legislativa, de hecho, la presentamos antes, pero debido a que esta comisión (Medio Ambiente y Cambio Climático), decidió mandarlo todo al archivo, entonces, la vamos a preparar de nuevo y luego del feriado de agosto la presentaremos para su estudio”.

“Lo primero sería prohibir el plástico de un solo uso y encontremos los mecanismos para sustituirlos, podemos utilizar las bolsas de manta y usar cubiertos no desechables, en los restaurantes se puede pedir eso. Podemos utilizar recipientes para llevar alimentos y utilizar los desechables”, argumentó Navarro.

En cuanto a los tiempos para dejar el plástico de un solo uso, Navarro agregó que se debe un tiempo necesario de alrededor de 6 meses o un año para que la gente se acostumbre a no pedirlo y los productores los vayan suprimiendo de su fabricación.

“Debemos darle un uso racional al plástico como las mesas de plástico son buenas, pero no olvidemos que en la producción del plástico se utilizan muchas sustancias tóxicas, y nos hemos acomodado a eso. Podemos usar vidrio, como las botellas de agua -esa es la lógica- algo menos contaminante. Y que las empresas que producen plásticos no amenacen con gente sin empleo”.

“Yo creo que hay que poner la prohibición y luego que el Código Penal y Procesal Penal, decidan cuáles son las sanciones, pero si creo, debemos ir en ese camino, aunque preocupa que las empresas que producen plástico traten de hacer campaña desvirtuando estas iniciativas. Esto no es invento de nosotros, hay 13 países en África que prohíben las bolsitas de plástico en el supermercado ya no digamos, como California en los Estados Unidos, es un ejemplo, también Costa Rica y Chile, están haciendo esto también, no es nuevo”, reiteró Navarro.

En cuanto a la responsabilidad de las empresas productoras de plástico, consideró como vital la “responsabilidad extendida del producto”, porque son los impuestos que paga la población salvadoreña se recogen todos los desechos plásticos en calles, hogares y otros sectores productivos del país.

“Son nuestros impuestos que nosotros pagamos para que recojan las bolsitas de agua y muchos de nosotros no consumimos las bolsitas de agua, ya no digamos las bolsitas que tienen comida chatarra que son plásticas y bien difíciles de procesar, entonces, si creo que debe haber regulación y se puede llevar un recipiente. No se está prohibiendo el consumo de las boquitas que quieran consumir y pueden ser con recipientes que se pueden intercambiar, ese el camino por donde debemos irnos conduciendo”, puntualizó Navarro.